Su Juan Bautista es un personaje real, un joven pastor de ruda hermosura, cuya delgadez musculosa hace verosímil una larga estancia en el desierto.Está representado hasta las rodillas, sentado, a contraluz, y parece dialogar con el cordero, remitiendo al pasaje Jn 1:29 del Evangelio de Juan.[4] La composición es muy sobria, en una estructura piramidal, resuelta en colores beige y pardo.[5] Esta obra solamente se conoce actualmente por una fotografía en blanco y negro.A la derecha se extiende un paisaje de suave luminosidad, con el detalle del Bautismo, que enriquece la composición y contribuye a identificar al personaje.