El salto de rebote es un tipo de comportamiento que se manifiesta en cuadrúpedos, especialmente en las gacelas, mediante el cual pegan grandes saltos hacia arriba, elevando simultáneamente las cuatro patas del suelo.
Por lo general, las patas se mantienen en una posición relativamente rígida (realmente es imposible estar quieto) y arquean el lomo mientras la cabeza apunta para abajo.
[3] El salto de rebote también se observa en animales domesticados tales como en las ovejas, pero por lo general solo es practicado por ejemplares jóvenes.
Se han propuesto varias posibles explicaciones para la razón que impulsa a practicar el salto de rebote.
John Maynard Smith biólogo evolucionista británico es de la opinión que "la explicación natural es que el salto de rebote es un indicador sobre la capacidad física y de escape", utilizado especialmente como una señal para advertir a los depredadores.