[1][2] Durante el período de la Regencia (1831-1840) se dieron varios conflictos entre los proyectos monárquico centralista y republicano federalista.
En dicho período existía un alto nivel de "anti-lusitanismo" entre la población que respaldaba además la indisciplina entre los militares.
Se nombró presidente de la naciente república a Inocencio da Rocha Galvao, entonces exiliado en EE.
Durante los combates murieron más de mil rebeldes, incluyendo muchos prisioneros ejecutados sumariamente, y apenas 40 soldados del gobierno.
[11][12] Otras 3.000 fueron encarceladas, de las que la mitad fue deportada al sur o reclutada en el ejército.
Sabino Vieira terminó sus días en una plantación jacobina en Mato Grosso, otros como Gomes de Freitas, Francisco José da Rocha, João Rios Ferreira y Manoel Gomes Pereira consiguieron escapar y unirse a los Farrapos.