Saad Zaghloul

Tanto la princesa Nazli como Mustafa Fahmi trabajaron con los ingleses, y Saad se ganó la confianza de Lord Cromer, quien recomendó a Saad ante el Khedive Abbas como Ministro de Educación en 1906,[4]​ puesto que ocupó hasta 1910.

Durante sus 6 años ejerciendo como ministro, lo hizo para distintos gobiernos que colaboraron con los británicos en la ocupación.

Esto hacía que fuesen vistos casi como traidores por parte de los nacionalistas extremos.

El 13 de noviembre de 1918, dos días después del armisticio que ponía fin a la Primera Guerra Mundial, el Wafd, liderado por Zaghloul, comunicó al Alto Comisionado británico, Sir Reginald Wingate (ahora llamado representante británico en Egipto), tras su negativa a recibirlos y a incluirlos en la Conferencia de Paz de París por no ser un portavoz electo facultado para representar a Egipto, que ellos, y no el gobierno, eran los verdaderos representantes del pueblo egipcio, para lo cual los simpatizantes de Saad recogieron firmas por todo el país.

Además, demandaban la abolición del protectorado y que fuese sustituido por un tratado de alianza.

Hasta en las propias ciudades recurrirían a la acción industrial las clases proletarias urbanas, ya que tanto el ferrocarril estatal egipcio como los tranvías de El Cairo se declararon en huelga.

Sin embargo, ese mismo día la delegación de Estados Unidos en la conferencia reconoció oficialmente el protectorado británico sobre Egipto, a pesar de las esperanzas del Wafd en que Woodrow Wilson los apoyase.

[14]​ La élite política egipcia, que nunca quiso el protectorado, y que consideraban al Wafd como su representante en París, boicotearon la misión de Milner,[15]​ determinando Zaghloul que nadie excepto él mismo negociase con los ingleses, y en el verano de 1920 se logró reunir con Milner en Londres.

[17]​ Ambos elaboraron un memorándum que podría haber reconocido formalmente la independencia de Egipto.

Sin embargo, Zaghloul temía que la firma de un acuerdo sin consultar con su gabinete, debilitaría su posición en Egipto, y no firmó el acuerdo, hasta que volviendo a Egipto, lo llevó a ser debatido en el gobierno.

Sin embargo, aunque Egipto ya disfrutaba de independencia política formalmente, era dependiente del extranjero, ya que las fuerzas armadas hubieran sido insuficientes para defender Egipto y Sudán sin la ayuda inglesa.

Tanto los egipcios como Inglaterra querían solucionar sus diferencias políticas, sin embargo, la cuestión de Sudán resultaba particularmente espinosa.

En 1899 Lord Cromer ideó una nueva forma de colonialismo denominada condominio, forma que permitía a Gran Bretaña añadir el Sudán a su Imperio en régimen de colaboración con Egipto.

Desde entonces, tanto Gran Bretaña como Egipto habían venido reclamando para sí la soberanía de Sudán.

Los nacionalistas egipcios rechazaban la pretensión de los británicos, que en el tratado de 1922 habían afirmado tener derecho a operar con total discrecionalidad en el Sudán y exigido que se preservara la unidad del valle del Nilo.

El Lord Allenby, presentó al primer ministro Zaghloul un ultimátum punitivo expresado en siete puntos, entre los cuales figuraba el pago de 500.000 libras egipcias, ofrecer una disculpa públicamente tras los sucesos acontecidos, y la modificación del statu quo en Sudán.

Saad Zaghloul antes del exilio
Saad Zaghloul en 1924