Posteriormente, recibió lecciones de los grandes solistas Alfred Cortot y Artur Schnabel.
Ante el auge del nazismo, en 1939 huyó a París y finalmente se terminó instalando en Nueva York.
[1] Firkušný tenía un amplio repertorio y destacó en la interpretación de Mozart, Beethoven, Schubert, Schumann, Chopin, Brahms, Músorgski o Debussy.
De Dvořák tocó a menudo su Concierto para piano en sol menor (el único que compuso), que interpretó por todo el mundo y grabó varias veces (en dos ocasiones acompañado por la Orquesta Filarmónica Checa, dirigida por Rafael Kubelík y Václav Neumann).
También interpretó música de cámara junto a distinguidos solistas, como los violonchelistas Pierre Fournier, Gregor Piatigorsky, János Starker y Lynn Harrell; los violinistas Nathan Milstein y Erika Morini; el viola William Primrose o el Cuarteto Juilliard.
Entre sus alumnos se encuentran Yefim Bronfman, Eduardus Halim, Alan Weiss, Sara Davis Buechner, Carlisle Floyd, Kathryn Selby, Avner Arad, June de Toth, Richard Cionco, Robin McCabe, Anya Laurence, Natasa Veljkovic y Carlo Grante.