Rubén Olivares

Olivares, más conocido por su apodo El Púas, fue un múltiple campeón mundial y considerado por mucha gente como el mejor campeón peso gallo de todos los tiempos.

Poseedor de una pegada descomunal en ambos puños que le dieron numerosas victorias por nocauts.

Olivares tuvo breves apariciones en el cine mexicano, sobre todo en películas de «ficheras».

Uno de estos encuentros fue ante Bernabé Fernández en Los Ángeles, California, venciéndolo en el tercer round.

Tras vencer a Alan Rudkin en la defensa de su título y a otros dos boxeadores en peleas donde no se disputaba ningún cinturón, Olivares comenzó una trilogía de combates contra su archi-enemigo y compatriota Jesús Chucho Castillo.

Posterior a este enfrentamiento, Olivares tuvo una racha continua de 6 nocauts, incluyendo una pelea en Nicaragua sin disputarse un cetro, otro encuentro en Tokio mientras defendía la corona ante Kazuyoshi Kanazawa después de enviarlo a la lona en tres ocasiones en 14 asaltos lo venció.

Otra ante el excampeón El Alacrán Efren Torres en Guadalajara, y una ante Jesús Pimentel en California, además de otro encuentro en esta misma sede, y otra pelea más en Tijuana.

Olivares ganó la pelea por nocaut en el segundo round, para convertirse en campeón mundial por cuarta ocasión.

Olivares ganó tres peleas en 1976 sin derrota alguna de por medio, incluyendo victorias sobre los colombianos Fernando Cabanela y José Cervantes, retadores al título mundial.

Pero en 1978, Olivares comienza a entrar en declive en su pelea número 93, tras vencer dos veces al futuro campeón mundial peso ligero José Luis Ramírez tras dos asaltos en Ciudad Obregón para consecutivamente ganar dos combates ante Shig Fukuyama e Isaac Vega.

Por los siguientes ocho años luchó esporádicamente obteniendo resultados tanto positivos como negativos, hasta que se retiró del boxeo profesional en 1988.