[1] La localidad está situada a una altitud de 882 m sobre el nivel del mar.
[2][3] Se considera factible un origen cristiano de la localidad, producido con la Reconquista, sin descartar uno anterior.
Aquí los pastores debían pagar tantos maravedíes por cabeza de ganado como se estipulara.
[4] Hacia mediados del siglo XIX, el lugar tenía contabilizada una población de 323 habitantes.
La repostería principal son los bollos de Santa Águeda, rosquillas, calostros, arroz con leche, flanes y natillas.