Trata sobre su protagonista homónimo, Rompetechos, un hombre bajito cuya mala visión genera numerosas situaciones cómicas.
[4] Rompetechos se publicó por primera vez en la revista Tío Vivo de la Editorial Bruguera en 1964.
En 2004, con motivo de su 40 cumpleaños se hizo un recopilatorio en formato Súper Humor (ISBN 84-406-9942-5) con un cómic que contenía su primera aventura y mucho material del personaje.
El investigador Juan Antonio Ramírez lo incluye en el apartado de Marginados, junto a otros personajes de la editorial, como Carpanta (1947), Gordito Relleno (1948), Currito Farola (1951), Don Danubio (1951), Morfeo Pérez (1952), Agamenón (1961) y Pitagorín (1966), caracterizados por un alto grado de extrañamiento respecto a su entorno.
Si lo que intenta es comprar algo invariablemente leerá mal todos los carteles (por ejemplo "cabañas usadas" en lugar de "castañas asadas") y luego tendrá un diálogo surrealista con el empleado de la tienda.
[9] (sin embargo, Rompetechos no suele estar "siempre cabreado", salvo cuando es injusta víctima de sus despistes).