La salsa se prepara con los siguientes ingredientes:[1][2] Como suele pasar con los platos populares, hay casi tantas versiones como colores, pero las diferencias son menores.
Algunos sustituyen una parte de almendras por avellanas, que se cultivan en la tierra originaria del romesco.
En general, se añade más aceite cuando se quiere una salsa más suave y líquida, o pan frito o carquinyolis (una galleta típica que contiene almendra, muy crujiente, de la zona de Tarragona de donde es esta salsa) si se quiere espesarla.
Para dar sabor y un toque personal se añade, según el cocinero, ajo crudo, guindilla, pimentón, etc. De sabor ligeramente picante pero no obligatoriamente, se usa para acompañar carnes, verduras y pescados.
También pueden acompañar a los calçots, aunque estos, en rigor, se deben acompañar de salsa salvitxada, que es ligeramente diferente ya que se usa mayor cantidad de tomate asado y menos ñoras.