En Venecia (1682–1685) comenzó una famosa colección de grabados, dibujos y pinturas de Giorgione, Correggio, Rembrandt, Claude Lorrain, Rubens, Antoine Coypel y Jean-Baptiste Forest.
En sus argumentos Roger de Piles introdujo el término "clair-obscur" (Claroscuro) para resaltar el efecto del color en acentuar la tensión entre la luz y la oscuridad en una pintura.
Esto le dio una visión general de la apreciación estética como articulación obtenida por el equilibrio entre el color y el dibujo.
Pintores que obtuvieron muy mala nota en todo lo que no fuera el color fueron Giovanni Bellini, Giorgione y notablemente Caravaggio, con 16 en el color y 0 (cero) en la expresión.
La lista es una transcripción de Manlio Brusatin: Histoire des couleurs (Paris: Flammarion, 1986, pp.