Regresó a Aguadulce al enfermar su padre y cuando este falleció, se dedicó al cultivo de caña de azúcar y a la ganadería.
A raíz de esto, se pidió la intervención militar estadounidense para controlar la situación.
En 1926, su gobierno firmó el Tratado Kellogg- Alfaro con los Estados Unidos que recibió el rechazo popular.
Desde entonces se dedicó a sus empresas privadas, cuyo centro estaba en su ingenio azucarero "Ofelina".
Su hijo, Roberto Francisco Chiari Remón, liberal como su padre, fue también Presidente de Panamá desde 1960 a 1964.