Rithmomachia

Al tener su base en la teoría de números griega y además teniendo un nombre griego, es natural que algunos especulen que el origen del juego debe buscarse en la Antigua Grecia y quizás en las escuelas posteriores de Bizancio o Alejandría.

Fue usado principalmente como una herramienta de enseñanza, pero gradualmente los intelectuales comenzaron a jugarlo por placer.

En el siglo XVI Francesco Barozzi publicó una versión en Venecia (1572) que posteriormente fue traducida a otros idiomas.

Aunque cada lado tenía el mismo arreglo de piezas, los números en ellas diferían, permitiendo a los dos jugadores, diferentes tipos de captura, y diferentes configuraciones ganadoras.

También hubo una variante propuesta por Fulke en el siglo XVI, con reglas de captura significativamente diferentes (y algo más consistentes).

Las victorias propias requieren colocar piezas en un arreglo lineal en el lado del tablero del oponente, con los números que forman el arreglo siguiendo varios tipos de progresión numérica.

Los jugadores acuerdan los valores a, b, y c, y la victoria se obtiene cuando se cumple con la relación indicada en la tabla según el tipo de juego.

Tablero de Rithmomachia hecho a mano