Su abuela María del Carmen Rodríguez fue activista política al mismo tiempo que Pablo Morillo volvía con la intención de pacificar y retomar los antiguos dominios reales españoles, esto habría de costarle el destierro a Tocaima.
Igualmente, la familia de Gaitán Obeso se relacionó con importantes políticos del partido liberal, puesto que su tía Zoila Gaitán Rodríguez se casó con Ezequiel Rojas, fundador de este partido.
[4] Gaitan Obeso se hizo conocido desde 1876 cuando estalló una de las muchas guerras civiles del siglo XIX, su actuación destacó sobre muchos otros militares y gracias esto se le envió una carta al congreso para que fuese ascendido al rango de general.
[5] El conflicto que se vivió en estos años se empezó a gestar en el departamento de Santander, pues la complicada situación fiscal del país –y en especial de esa región- hacía propicias las condiciones para un levantamiento popular.
[4] Para hacer frente a este problema económico el general Wilches decretó que por cada bulto de harina se debían pagar 10 pesos, con el fin de estabilizar las finanzas del Departamento.
El presidente Rafael Núñez no intervino directamente en la contienda porque pudo haber significado apoyar al general Aldana de quien esperaba una renuncia voluntaria, sin embargo las tropas del Gobierno Federal negociaron con Gaitán Obeso para concluir que con sus hombres debería dispersarse y responder únicamente por los delitos comunes.
Tal vez la principal razón por la que se le unieron más partidarios haya sido el hecho que al general Gaitán Obeso se le veía y consideraba como un hombre generoso.
Después de salir victorioso de Honda, Gaitán Obeso decidió marchar sobre Barranquilla, allí fue recibido como un héroe pues se organizaron procesiones a su nombre y se le dieron obsequios.
Hay que agregar que Gaitán Obeso ya no era más el líder absoluto de los rebeldes pues otros generales y comandantes provenientes de varias zonas del país –y con mayor rango- tenían el control del ejército, lo cual resultó fatal pues no se hicieron esperar las escaramuzas y reyertas internas.
Prestán estaba relacionado con el movimiento de Gaitán Obeso y aun hoy se duda de sí incendio Colón, lo que si es verdadero es la negociación entre Gaitán Obeso y el almirante norteamericano James Edward Jouett.
Según José María Samper la población cartagenera estaba condicionada ecológica y naturalmente para triunfar.
Las razones son que a diferencia de Barranquilla, Cartagena tenía una tradición militar y guerrerista que estaba implícita en el actuar de sus habitantes, mientras que en Barranquilla se dedicaban a las actividades comerciales y por ende el sentido militar no estaba desarrollado y estaban condenados a perder.
[8] Se cree que en el camino contrajo la fiebre amarilla, aunque la versión de Ricardo Llano propone un envenenamiento con digitalina orquestado por jesuitas panameños.
Este grupo de personas se dedicaba a cometer actos vandálicos en la región de Guaduas y zonas aledañas, sin embargo el historiador Ricardo Isaza admite que existían dos sociedades con este mismo nombre.