[1] En efecto, esta propaganda afirmaba que todo hombre casado debería pagar un ducado por él, un ducado por su esposa, dos reales por cada niño, un real por cada sirviente, cinco maravedís por cada oveja o cordero, así como una cierta suma por las tejas de su casa.Lo cierto es que esta propaganda, aunque falsa y malintencionada, creó un ambiente propicio para la agitación pública, sobre todo en las ciudades cuyos procuradores habían votado el servicio.Melón fue linchado y colgado boca abajo en la Cruz del Mercado, frente a la homónima ermita, con una horca de la madera que allí hay siempre del pinar de Valsaín.Pero el populacho se negó a escuchar a Tordesillas, se apoderó de su persona, destrozó el cuaderno que contenía la justificación de lo hecho en las Cortes y terminó estrangulandole en plena calle.Con soga al cuello lo arrastraron entonces por las actuales calles Juan Bravo y Cervantes hasta cruzar la muralla, sin que el deán de la catedral y algunos canónigos que habían salido en su ayuda pudiesen alcanzarlos.Mas como toda aquella gente era común y vil, no hicieron caso de ellos, ni tuvieron reverencia a la Iglesia.Desde de San Francisco, la exultante muchedumbre subió el cuerpo del procurador, ya muerto, calle hacia arriba.Este emprendió la huida ante una multitud enfurecida, pero finalmente fue hecho prisionero y encerrado en la fortaleza de la ciudad.[11] El del Infantado tardó pero respondió: ejecutó a Pedro Coca y alejó a su hijo hacia Alcocer para evitar que continuase comprometiendose en un asunto tan delicado, como aparentemente lo estaba haciendo.[15] El tono de la discusión subió rápidamente, y las amenazas del corregidor no hicieron más que exasperar a la multitud concurrente.Su negativa tampoco impidió que la multitud enfurecida llevase a cabo el acto por propia iniciativa: junto con la mansión, muchos archivos del Estado guardadas en ella ardieron en las llamas, y solo una pequeña parte pudo ponerse a salvo.[21] El 14 de junio emprendió su retirada a Francia, no sin antes proferir insultos contra los burgaleses: Los injuriosos dichos de Joffre se difundieron rápidamente, pero Osorio se negó a firmar una orden contra él.[26][11] En cambio, no se registraron incidentes en Valladolid, principalmente por la presencia en la ciudad del cardenal Adriano y el Consejo Real.[11] En Soria, por su parte, los únicos incidentes tuvieron lugar meses más tarde, cuando la casa del comendador Aguilera, uno de los procuradores, fue saqueada y su esposa debió refugiarse en la localidad de Portillo.Sin embargo, estas medidas no resultaron útiles para frenar el movimiento comunero por cuanto resultaban tardías y el mismo comenzaba a bregar por reivindicaciones más profundas de tipo políticas y la reorganización del gobierno a través de uno nuevo, la autodenominada Santa Junta.
Iglesia de San Miguel, frente a la cual tuvo lugar el ajusticiamiento del procurador Tordesillas.