Esta técnica puede generar fotografías que parecen auténticas a observadores humanos.Por ejemplo, una fotografía sintética de un gato que consiga engañar al discriminador (una de las partes funcionales del algoritmo), es probable que lleve a una persona cualquiera a aceptarlo como una fotografía real.Habitualmente, el generador está "sembrado" con una entrada aleatorizada que se escoge de un espacio latente predefinido (p. ej.En ambas redes se aplica la retropropagación, de modo que el generador produce imágenes progresivamente mejores, mientras el discriminador se refina cada vez más a la hora de distinguir esas imágenes sintéticas.Simplificando el concepto, esta red neuronal es extremadamente eficiente al momento de "rellenar" la información faltante.Simultáneamente, la red discriminativa se encarga de discernir entre la música real (ya existente) que se le proporciona y la música "falsa" (aquella que la red generativa intenta generar).