Rebelión de Nórico Ripense

El peligro que suponía para el Imperio perder sus provincias más ricas hizo que agrupase tropas de sus provincias europeas en Italia para enviarlas a África.[2]​ La provincia de Nórico Ripense se encontraba para 431 en una situación de clara pobreza por lo que el aumento de las contribuciones que debían pagarse tuvo que enfurecer a la población y llevó a una rebelión contra el gobierno imperial.La imposibilidad de detener la revuelta por las autoridades locales hizo necesario el envío de un ejército desde Italia al mando del propio comandante supremo del ejército: Aecio.Las tropas llegaron a Nórico y en una rápida campaña, dónde brillo Merobaudes, pudieron derrotar a los sublevados ya que, avanzado ese mismo año, se encontraban luchando contra los francos junto al Rin.[3]​ No se conoce si la provincia recibió algún alivio fiscal para evitar nuevas rebeliones pero no se volvió a registrar ninguna durante el resto de su pertenencia al Imperio occidental.