Los principales pueblos que unía son Monte Águila, en Cabrero, Cholguan en Yungay, y Polcura, en Tucapel.
Aunque se planteó en sus inicios como un ferrocarril trasandino por Antuco, la idea no prosperó, materializándose solo hasta Polcura.
En diciembre de 1905 se completa el primer tramo, entre Monte Águila y Cholguán.
A pesar de este aparente fracaso, el ferrocarril significó un importante progreso en las comunicaciones, tanto así que en torno a sus estaciones se fundaron diversos pueblos homónimos, como Huépil, Polcura, entre otros.
También en esos años, aparecen buses rurales para el transporte de pasajeros, ofeciendo un viaje más barato que el tren.