Río Curueño
[4][5] El escritor Julio Llamazares describió el Curueño y todos sus pueblos ribereños, incluido el suyo natal, en El río del olvido, un libro donde narra el viaje a pie que hizo en el verano de 1981 remontando su curso.[6] Su origen geomorfológico está en una cuenca endorreica que acumuló sedimentos en un sistema lacustre central durante buena parte de la Era Cenozoica, hasta que se abrió un desagüe hacia el Atlántico (río Duero).Esto pudo suceder bien mediante una captura fluvial desde el Atlántico (por erosión remontante), o bien por un cambio climático a condiciones húmedas que hiciera rebosar el nivel del agua en la cuenca.La actividad tectónica a partir de esos periodos no ha generado un relieve significativo y no podría haber contribuido sustancialmente a este cambio de drenaje.Discurre también sobre materiales sedimentarios cenozoicos en los que el río ha creado una abundante serie de terrazas fluviales (han llegado a contabilizarse hasta catorce niveles cuaternarios).