Punto omega

Esto no significa que la divinidad sea un producto de la convergencia, en una unidad final con el Escathon y con Dios, pues el autor afirma su preexistencia.Mientras que desde la religión se supone que un Dios ha establecido directivas concretas sobre el destino final del Universo, desde una postura científica, por el contrario, podemos observar tendencias naturales y pensamientos racionales y de ahí, podemos estimar hacia dónde podrá ir la humanidad en un futuro muy lejano.O de existir otras civilizaciones inteligentes en el universo, independientes a la humanidad, estas podrían seguir dicha mecánica evolutiva, logrando el punto omega.Teilhard de Chardin escribe: “En el Universo, como hemos reconocido al principio, es la vida lo que constituye el fenómeno central –y, en la vida, el pensamiento- y en el pensamiento la ordenación colectiva de todos los pensamientos en sí mismos.Pero he aquí que, por una cuarta opción, nos encontramos llevados a decidir que, más profundo todavía, es decir, en el corazón mismo del fenómeno social, está en marcha una especie de ultra-socialización: aquella por la cual la Iglesia se forma poco a poco, vivificando por su influencia, y reuniendo bajo su forma más sublime, todas las energías espirituales de la Noosfera”.
La visión de Chardin sobre la evolución del cosmos en árabe.