[1][2] Tras afincarse en Bilbao en 1532 las mercedarias se trasladan en 1567 al lado izquierdo de la ría, frente a La Naja.
En 1621 inauguran el convento y la iglesia que da nombre al puente, al muelle y a la pequeña calle que le sigue en la margen derecha.
Reconstruido posteriormente en 1750, fue finalmente adquirido por el Ayuntamiento de Bilbao.
[6] Desde 2012, y como consecuencia de una inocentada de la Asociación Bilbao Histórico, se propagó una falsa leyenda sobre las farolas del puente que fueron instaladas tras las inundaciones del año 1983.
A pesar de haber sido desmentido, el bulo se sigue extendiendo.