Entre ellos figura la presa del Duero bajo el puente mayor de Soria —subtus majorem pontem—.
[1] Torres Balbás señala los catorce ojos del puente «contemporáneos de la cerca o reconstruidos por entonces.
En 1915 se ensanchó el tablero, desde 5 hasta 7,7 m, mediante voladizos de hormigón y se modificaron los tajamares que, según testimonian fotografías de época alcanzaban hasta el peto, manteniéndose un único carril para la circulación regulado por un semáforo.
Sus pilares aparecen custodiados por tajamares sobre los que se han ensanchado los laterales en la última restauración.
Salva el desnivel existente entre las dos orillas que se encuentran a distinta altura manteniéndose un único carril para la circulación.