Prueba del espejo

Estas reacciones pueden incluir el mover su cuerpo para poder ver mejor la marca en el espejo o tocársela mientras la observa en el reflejo.

[2]​[3]​ Durante su visita a un zoológico, Darwin situó un espejo frente a un orangután y registró las reacciones del animal, que incluyeron la realización de una serie de expresiones faciales.

La prueba ha sido pasada por chimpancés,[4]​ gorilas,[5]​ orangutanes,[6]​ delfínidos[7]​ (incluyendo orcas[8]​ y falsas orcas[8]​), elefantes,[9]​[10]​ macacos de Rhesus,[6]​ monos capuchinos,[11]​ seres humanos, córvidos como las urracas[12]​[13]​ y posiblemente palomas.

Los bebés humanos tienden a fallar el test hasta el primer año y medio o dos.

Sin embargo, la metodología del experimento ha sido criticada debido al entrenamiento dado a los individuos para efectuar la respuesta positiva (p. ej: picotear la marca).

Perro mirándose al espejo.
Urraca , una de las especies que ha pasado la prueba.