Prostitución en Polonia

Se cree que el primer burdel registrado (“Dom publiczny”) en Polonia se encontraba en Bochnia en el siglo XV, y atendía a los comerciantes que venían a comprar sal de las minas de la región.

[1]​ Desde el siglo XV, la policía inspeccionaba los burdeles y expulsaba a las mujeres que se creía infectadas.

Durante el período de las particiones polacas (1795-1918), la prostitución floreció abiertamente, mientras que anteriormente, durante la República de las Dos Naciones (1648-1795), había estado confinada a burdeles y calles secundarias cercanas a los cuarteles.

También se prohibían los retratos de la Familia Real u otros símbolos estatales en ellos, así como los ofrecimientos por las ventanas sin estar completamente vestidas.

Aunque había sanciones por hacer trabajar demasiado a las mujeres, normalmente atendían entre 10 y 12 clientes al día.

Durante este período, el Estado emprendió numerosos procesos contra la prostitución organizada y los proxenetas.

[3]​ Oficialmente, la prostitución no existía, ya que según la ideología marxista, desaparecería en una sociedad socialista con igualdad de medios.

Esta disminución se compensó en parte con la reducción de las prohibiciones, lo que permitió la publicidad en los periódicos.

[5]​ El número total de prostitutas en Polonia es desconocido y las estimaciones varían considerablemente, por lo que deben interpretarse con cautela.

Sin embargo, las ONG y las autoridades gubernamentales identificaron 315 víctimas en 2008, [8]​ lo que indica la persistencia del problema en el país.

(“United States Department of State Office to Monitor and Combat Trafficking in Persons”) clasifica a Polonia como un país de "Nivel 1", lo que significa que el gobierno polaco cumple con los estándares mínimos para la eliminación de la trata de personas, aunque se reconocen los esfuerzos adicionales necesarios para abordar plenamente el problema.