A partir de la raíz de la yuca (Manihot esculenta, también llamada mandioca) se producen los siguientes productos: harina seca, harina de agua y harinas mixtas; también goma, fécula, el tucupí, la tapioca y harina de tapioca.
Sin embargo, la transformación industrial ha ido en aumento.
La tecnología para transformar las raíces de yuca en harina es tradicional en Brasil y se mantiene principalmente en la región amazónica y el noreste.
Se lleva a cabo en pequeñas unidades artesanales rurales, conocidas como casas de farinha («casas de harina»), utilizando equipos rústicos y mano de obra familiar o empleados locales.
Ya en 1551, el sacerdote jesuita Manuel da Nóbrega, al escribir sobre su visita a Pernambuco, se refirió al beiju y la harina elaborados por los pueblos indígenas.