En esta región una partícula es necesariamente propulsada por concurrencia locomotriz con el espacio-tiempo rotativo.
En este proceso, si un objeto material entra en la ergosfera de un agujero negro se divide en dos.
En resumen, el proceso resulta en una disminución del momento angular del agujero negro, y por tanto en una reducción correspondiente a una transferencia de energía donde la pérdida de momento se convierte en energía extraída.
El proceso obedece a las leyes termodinámicas de los agujeros negros.
Una consecuencia de estas leyes es que si el proceso se repite continuamente, el agujero negro podría finalmente perder su momento angular y convertirse en un agujero negro no rotativo.