La prisión fue ordenada a fabricar por Karl von Hänisch, y empezó sus operaciones en septiembre de 1917.
[3] El campamento llegó a tener entre 500 y 600 oficiales británicos como prisioneros.
Hubo aproximadamente entre cien a ciento sesenta celadores custodiando la prisión.
Por lo que decidieron alargar el conducto hasta un campo de maíz ubicado treinta metros delante del muro.
El orden era según el trabajo de cada uno: al principio los que más habían contribuido en la elaboración del túnel y al final los que menos ayudaron en la construcción.