Una es premières côtes de Blaye blanc, para el vino blanco, y la otra premières côtes de Blaye rouge, para el vino tinto.
Sólo tienen derecho a la denominación de origen controlada "Premières Côtes de Blaye" inicialmente reconocida por decreto de 11 de septiembre de 1936, los vinos tintos o blancos que reunieran una serie de condiciones fijadas legalmente.
La zona de producción son una serie de municipios en los siguientes cantones: Los vinos deben provenir de un ensamblaje de al menos dos de las siguientes variedades: El porcentaje global de las variedades secundarias no puede ser más del 30% de la variedad de cada explotación.
La producción media anual de vino blanco seco en esta denominación es de 16.000 hectolitros, y la superficie declarada la de 250 hectáreas.
Por lo que se refiere al vino tinto, son 330.000 hl por año y 6.000 ha de superficie declarada.