Porfirio Muñoz Ledo

Uno de los fundadores del PRD, durante sus últimos años militó en el Movimiento Regeneración Nacional.[3]​ Porfirio Muñoz Ledo contrajo matrimonio por primera ocasión en 1960 mientras realizaba estudios en Francia, con Marie Hélène Chevannier.En 1973, cuando ya fungía como Secretario del Trabajo, contrajo matrimonio con Berta Yáñez Centeno Cabrera —hermana de los también políticos César, Claudia, Rolando e Ismael Yáñez Centeno Cabrera, oriundos del estado de Colima—[5]​[6]​ y con quien procreó a Alejandro Napoleón y a Verónica Muñoz Ledo Yáñez Centeno; y de quien se divorció en 1996.Fue precandidato presidencial en el ritual sucesorio priista de 1976, según cuenta, en sus memorias, el presidente Luis Echeverría acudió a visitarlo a su casa, cuando llegó Echeverría, casi sin hablar caminó hasta el jardín, y le dijo: “Es muy pequeño para recibir contingentes”.Años después, Muñoz Ledo recordó: “En ese instante creí que el dedo me había iluminado.Y compré el terreno de atrás”, creyó que la frase de Echeverría le anticipaba su destape como candidato oficial, y que no habría suficiente espacio para recibir a los contingentes del PRI que irían a felicitarlo públicamente, al final Echeverría se decidió por López Portillo, nuevamente fue precandidato presidencial en 1982, aunque finalmente el presidente López Portillo designó como candidato a Miguel de la Madrid.Sin embargo la situación causó un escándalo mediático y la protesta del gobierno estadounidense a través de su embajador en México John Gavin.Fue miembro del PRI hasta que salió de sus filas y fundó, junto con Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano e Ifigenia Martínez, la Corriente Democrática que más adelante se convertiría en el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en donde formó parte de su consejo nacional, fue su representante ante el recién creado IFE y fue elegido su presidente nacional.La elección resultó sumamente controvertida, puesto que el triunfo de Aguirre Velázquez fue inmediatamente impugnado por el candidato del PAN, con lo cual Porfirio Muñoz Ledo quedó marginado en el proceso.Fue una de las figuras más influyentes del PRD hasta que decidió renunciar en 1999 tras pretender fallidamente la nominación a la presidencia de la República, que finalmente fue otorgada a Cárdenas por tercera vez consecutiva.Tras las controvertidas elecciones en las que se declaró perdedor al candidato perredista, Muñoz Ledo apoyó a este en realizar una presidencia alterna, denominada "legítima".