[1] Fue precursor junto a su hermano Iván en buscar referencias más allá de la mesa de montaje, con ideas impulsivas.
Su primer trabajo importante fue como asistente de sonido en la serie de televisión Santa Teresa de Jesús (1984) y asistente de montaje de El juego más divertido de Emilio Martínez Lázaro.
En 1994 fue galardonado con el Goya al mejor sonido por su trabajo en Los peores años de nuestra vida con Gilles Ortion, José Antonio Bermúdez y Carlos Garrido.
[2] Volvería a ser candidato al Goya al mejor sonido en 2001 por Lucía y el sexo, en 2004 por Incautos, en 2005 por Princesas y en 2007 por Siete mesas de billar francés.
Murió en Cuba de un infarto cuando estaba dando un curso de sonido en la escuela de cinematografía en San Antonio de los Baños.