Narra la victoriosa campaña militar del año 1147 que culminó en la conquista del puerto de Almería.
De las 385 líneas y media que se conocen, 293 consisten en la clásica enumeración de los guerreros o dénombrement épique propia de la poesía épica.
[1][2] Este poema ha sido motivo de un gran interés por parte de críticos y académicos ya que aporta importantes claves para entender los orígenes y el desarrollo de la épica castellana (los cantares de gesta) y la naturaleza de las costumbres aristocráticas y militares de los reinos cristianos en la Hispania medieval.
[1][2] Ha sido descrito como «una reliquia de incomparable interés para la arqueología cultural del siglo XII»[3][2] y «un espléndido reflejo de su tiempo y, en este sentido, de gran valor también como literatura».
[4][5][2] En cuanto a su estilo, ha sido relacionado con el paralelismo de la poética de la Biblia Hebrea y con los modelos clásicos de Virgilio y Ovidio.