Además, en la plaza confluyen numerosas calles, consecuencia del papel central que esta plaza desempeñó durante siglos en la vida de la ciudad.
En especial cuando Valladolid fue la capital del imperio español entre 1601 y 1606 cuando fue residencia permanente.
Fue habitado por los monarcas españoles Carlos I, Felipe II y Felipe III y también por Napoleón Bonaparte durante la Guerra de Independencia (enero de 1809).
Ha llegado al presente con numerosas alteraciones estructurales de sus primitivas trazas, concluidas en torno a 1528.
Su construcción se inició a mediados del siglo XVI.
El emperador Carlos V pernoctó en numerosas ocasiones en este palacio.
Se aprueba la creación de este instituto público en 1901 por parte del ministerio.
En 1990, debido a las necesidades de aulas, se construye un nuevo edificio de aulas y otros servicios al fondo del patio, al lado del gimnasio.
En 2005 se pensó en construir un hotel de 5 estrellas, proyecto que fue desechado al año siguiente.
Fue construido para albergar las dependencia judiciales que se encontraban emplazadas en el palacio de los Vivero.