Su tratamiento explícito de la homosexualidad en sus obras literarias que, frecuentemente, tenían una evidente raíz autobiográfica, le acarreó varios problemas con la Justicia, sobre todo, en su primera etapa.
[2] Tondelli calificaba su obra como una novela por episodios, aunque cada uno de ellos tiene la suficiente autonomía como para poder ser considerados verdaderos cuentos.
En este tiempo inició su profunda amistad con Francois Wahl, quien se convertirá en un punto de referencia importantísimo en toda su producción literaria.
En 1985 publicó su novela Rímini (Bompiani), que tuvo muy buenas ventas pero fue acogida con frialdad por la crítica.
Tondelli estuvo sopesando hacer una versión cinematográfica de este libro, pero finalmente el proyecto no llegó a nada y rechazó la oferta económica que le hicieron los hermanos Carlo y Enrico Vanzina.
Tiene también una base autobiográfica y se considera que el personaje de Leo (un escritor homosexual de éxito que pierde a su novio, Thomas, un joven músico alemán) es un trasunto del propio Tondelli.
Es una pieza nostálgica, escrita por un joven de treinta años que ya no se siente tan joven y que necesita mirar hacia atrás, quizás de una manera diferente.