La epidemia había afectado a parte de Cerdeña, en particular al Campidano.
[1] Desde Alguer, la epidemia llegó rápidamente a Sácer, diezmó a la población y luego se extendió hacia el sur, golpeando el norte de Campidano y la ciudad de Cáller.
Desde la isla, la epidemia llegó a Nápoles y se la conoció como la Peste de Nápoles de 1656.
Una vez que se estableció el Consejo Central de Salud, los comisionados fueron enviados a las localidades para imponer la cuarentena.
Sin embargo, la infección se trasladó al sur y, aunque se instaló un cordón sanitario para proteger a Oristán y Cáller, durante el verano la infección se extendió a la llanura de Oristán y Campidano.