Persecución de alemanes e italianos en Costa Rica durante la Segunda Guerra Mundial

[4]​ También se les congelaron sus cuentas bancarias[2]​ y las propiedades que estuvieran hipotecadas eran requisadas por los bancos estatales.

[4]​ Una vez terminada la guerra, la mayoría de estos ciudadanos fueron liberados y los que estaban presos en Estados Unidos fueron retornados al país.

[4]​ En otros casos cuando los propietarios reinscribieron a nombre de amigos o allegados sus propiedades (para que estas no fueran confiscadas) los nuevos dueños se negaron a devolverlas,[4]​ aunque en otros casos las propiedades fueron devueltas, quedándose el testaferro que las administró durante el cautiverio del dueño original solo con una parte o como socio.

A mediados de su período el presidente Rafael Ángel Calderón Guardia realiza una alianza con el Partido Comunista liderado por Manuel Mora y la Iglesia católica jefeada por monseñor Víctor Sanabria, para promulgar una atrevida reforma social conocida como las Garantías Sociales.

Entre los opositores a Calderón se encontraban varios que habían sido claros simpatizantes del fascismo como el expresidente León Cortés Castro y Luis Dobles Segreda[7]​ por lo que la izquierda hacía llamados a cerrar filas en torno al gobierno progresista de Calderón para impedir la llegada al poder del fascismo.