Este pendón tenía, según antiguos historiadores, trece lunas bordadas de oro sobre tela morada, muy preciosa y muy rica y hacía unos tornasoles como las plumas del gallo, por lo cual después lo llamaron rabo de gallo.
Según otras fuentes mantuvo sólo un retal del primitivo, de unos diez por seis centímetros, cosido en su parte superior derecha.
Esta pieza fue restaurada en diversas ocasiones hasta la confección de la actual bandera en 1990.
El pendón tiene honores de Capitán General, y en este traslado es escoltado por una compañía militar.
El modelo histórico ha quedado casi exclusivamente para la conmemoración cívico religiosa del 9 de octubre, usándose la reproducción estrenada en 1990.