[1] Nació en Orduña, Vizcaya, Imperio Español, en 1641, hijo de una familia acomodada y profundamente cristiana.
Una vez instalados, se dedicó al comercio del tabaco, que le proporcionó bienestar y dinero.
Dado que algunas propuestas de los negocios lo alejaban de la rectitud y la justicia, decidió abandonar el negocio y se contrató como escribano en una nave que lo trasladó el año 1666 al Virreinato del Perú, estableciéndose en el Alto Perú, actualmente Potosí-Bolivia.
Apenas oía la palabra eucaristía se inclinaba con mucho fervor y permanecía adorando el Santísimo Sacramento por largo tiempo.
Los enfermos reclamaban su presencia junto al lecho del dolor; las viudas, su consuelo; las madres le presentaban a sus hijos para pedirle el necesario sustento.
Los fieles visitan su tumba y se encomiendan en sus diversas necesidades, muchas son las acciones de gracias por las intercesiones otorgadas por el buen hermano.
El 12 de cada mes a las 19:30 horas, se realiza la Santa Misa en honor y petición por su pronta beatificación, con cantos en euskera (lengua vasca).