Abandonó Francia, junto con su familia, huyendo del proceso revolucionario francés iniciado en 1789.
Comenzó a trabajar muy joven en Londres en la compañía "Gordon, Murphy and Co."
Ruskin continuó siendo agente de Pedro Domecq en Londres que funcionaba muy bien.
Pedro Domecq había contraído matrimonio en Londres, en 1814, con Diana de Lancaster, con la que tuvo cinco hijas (Diana, Adela, Cecilia, Alicia y Carolina), que fueron educadas en Francia y se casaron allí con aristócratas y quedaron desligadas del negocio familiar.
Tras su muerte, su hermano Juan Pedro asumió la dirección de la empresa y terminó comprando las participaciones a sus sobrinas y convirtiéndose en propietario único del negocio familiar.