Patrimonio cultural boliviano

Se denomina patrimonio cultural boliviano al conjunto de bienes, tanto materiales como inmateriales, acumulados a lo largo del tiempo.

[1]​ La Ley dispone que los bienes, según necesidad deberán ser clasificados, registrados, restituidos, repatriados, protegidos, conservados, restaurados, difundidos, defendidos y regula la propiedad, custodia, gestión, proceso de declaratorias y salvaguardia del Patrimonio Cultural Boliviano.

Son definidos como bienes culturales; (...)todas las manifestaciones inmateriales y materiales de la cultura, cuyo valor depende de su origen, naturaleza, espacialidad, temporalidad, su contexto social e identidad cultural.

[1]​ Es la figura jurídica mínima establecida en la ley y supone la individualización, para un bien concreto, de la protección que esta otorga al Patrimonio.

Las Declaratorias podrán ser: Emitida por el Órgano Legislativo del nivel central del Estado, en el caso de vestigios y contextos arqueológicos, paleontológicos y subacuáticos no se requiere la declaratoria expresa para que sean reconocidos como Patrimonio Cultural Boliviano.

La gran Piedra del Fuerte de Samaipata