Fue propuesto por el cabildo de Jaén para obispo tras la muerte de Pedro Martínez y confirmado como tal por el arzobispo de Toledo, el Infante, Sancho de Castilla como administrador apostólico que era de Toledo por falta de edad.
[1] Bajo su pontificado le dio título de Colegial a la Iglesia Mayor de Úbeda, que años antes Fernando III de Castilla había intitulado como iglesia con advocación a la Asunción de Nuestra Señora a la que era mezquita mayor en el Alcázar de Úbeda.
[2] La Concordia que hizo el obispo fray Domingo de Soria en 1245 con la Orden de Calatrava siendo su maestre Fernando Ordóñez la confirmó en 1256 el obispo Pascual y convino de nuevo con el maestre de Calatrava, Pedro Yáñez, determinado en ella los derechos y provisiones que el obispo de Jaén y su arcediano habían de llevar en los lugares que poseía la Orden en el partido de Martos, y se hacía extensible a otros lugares que ganase la Orden.
Y en cuanto a diezmos y primicias, que el obispo se llevase una parte y el maestre dos.
[3] El obispo murió fuera de su obispado y su cuerpo fue llevado a la diócesis, donde se le dio sepultura en la catedral.