Con respecto a una condición de control de Xs coloreadas, la respuesta se ve facilitada cuando palabra y color son compatibles (decir azul ante la palabra "azul" escrita en tinta azul), y se ve interferida cuando son incompatibles (decir rojo ante la palabra "verde" escrita en tinta roja).
Cuando el punto aparece cerca de una zona que estaba siendo atendida, se supone el tiempo de respuesta debe ser más corto, mientras que los TR más lentos corresponden a zonas no atendidas (inhibidas).
Utilizado originalmente en estudios sobre la ansiedad, se ha ido extendiendo con diversas variantes a otras parcelas de la psicología experimental.
Este paradigma se utiliza a menudo durante el registro de potenciales evocados.
Debido a la rapidez de la presentación, la variable dependiente suele ser la precisión, más que la velocidad.
Si el target se numera como O, el ítem que le sigue estaría en la posición + 1, el siguiente en la +2, y así sucesivamente.
Entre muchas aplicaciones, esta técnica usa para estudiar el fenómeno del parpadeo atencional.
En algunos ensayos elegidos al azar aparece una señal stop para que el sujeto detenga la respuesta planificada.
Esto permite al experimentador localizar en qué momento del procesamiento se sitúa el "punto de no retorno" (es decir, el momento a partir del cual resulta ya imposible detener la respuesta).
A cada estímulo le corresponde un botón (por ejemplo, siempre que aparezca una P, se debe pulsar el derecho, y cuando lo haga una Q, el izquierdo).