Según el ministro, la adjudicación del permiso para la producción se otorgaría a aquellos que mayores garantías den al gobierno y que el mismo apoyaría financieramente.[7] Este anuncio tuvo como voces opositoras dos frentes: los importadores de esta materia prima y la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) que argumentaba que la aplicación de un impuesto a la importación para financiar la nueva empresa, encarecería las publicaciones y además se oponía a que el Estado Nacional pudiera ingresar como socio capitalista del emprendimiento.[15][16] De acuerdo al contrato entre el Estado y la empresa, el primero asumiría una participación minoritaria y se retiraría del proyecto a los 10 años de la puesta en marcha, lo que nunca ocurrió.Rey y por Rafael Ianover, quienes eran testaferros de David Graiver.[17] En 1975, Ingeniería Tauro SA y el Ing. César A. Doretti transfirieron 1 568 650 acciones a la compañía Galerías da Vinci S. A., que pertenecía al Grupo Graiver desde el 17 de abril de 1975.[19] Días antes, el mexicano Gabriel Alarcón dueño del diario El Heraldo, le dijo a David Graiver "Tu debes vender Papel Prensa, porque te va a costar la vida.Así, Lidia Papaleo y su hermano vendieron sus acciones a la sociedad denominada FAPEL, constituida por el diario Clarín, el diario La Nación, el diario La Razón, Ernestina Herrera de Noble, Héctor Magnetto, Marcos Peralta Ramos, Hugo Fernando Peralta Ramos y Bernardo Sofovich.[17] Poco después Papaleo fue llevada detenida a un centro clandestino de detención, donde recordó posteriormente.Cuanto más sangraba yo, él me eyaculaba encima.[20]Al terminar la reunión, el abogado del Diario Clarín, Bernardo Sofovich, apartó a Lidia Papaleo y le advirtió que debía huir del país esa misma noche por su propia seguridad.[26][7] Según Clarín, Fapel cambió su objeto social original «para asegurar la continuidad de Papel Prensa», que en ese momento se encontraba paralizada.[27] El mismo día el diario Clarín anunciaba que "los diarios argentinos producirán su propio papel" y detallaba que la decisión se había dado en la "gravitación del gobierno de las Fuerzas Armadas".Cuando el líder montonero Mario Firmenich fue detenido en Brasil, afirmó: «Papel Prensa nos pertenece a nosotros».[31] De acuerdo a Clarín, cuando Lidia y Osvaldo Papaleo y Rafael Ianover hicieron declaraciones en varios juicios en democracia, nunca hablaron de los hechos que hoy denuncian a la justicia.[7] La dictadura militar intervino Papel Prensa en agosto de 1977, intervención que fue levantada a los cinco meses.Esta hoja pesa 48,8 gramos por metro cuadrado y tiene un ancho de 770 cm.Entre las irregularidades relevada por el veedor fue que la Secretaría de Desarrollo Industrial, a cargo del Dr. Raymundo Juan Pío Podestá, no había exigido ni realizado el estudio técnico-económicofinanciero de dichos diarios, a fin de asegurar la financiación del proyecto tal como lo exigía el pliego.Asimismo, se había omitido exigir el compromiso asumido por los tres diarios de garantizar o avalar, con sus propios patrimonios sus obligaciones contractuales.[37] Instruye además a la Procuración del Tesoro de la Nación para que intervenga en las causas relacionadas con la firma Papel Prensa SA.relativas a prácticas desleales, actividades monopólicas, abuso de posición dominante, perjuicios al Estado Nacional en su carácter de socio y a los restantes accionistas y a los adquirentes en Bolsa, así como en todas aquellas que pudieran surgir de las investigaciones que se realicen, efectuando las denuncias, reclamos y querellas que correspondan.Los fiscales Rodolfo Marcelo Molina y Hernán Schapiro destacaron que «las pruebas revelan que los hechos denunciados podrían ser parte de acciones persecutorias e impregnadas por espurios intereses económicos».Periodistas como Horacio Verbitsky y políticos como Rafael Bielsa realizaron sendas denuncias en varios medios sobre los delitos de lesa humanidad cometidos en la compra de la empresa.La Nación, Arte Gráfico Editorial Argentino (AGEA) y SA La Razón E. E. F. I.[54] Instruye además a la Procuración del Tesoro de la Nación para que intervenga en las causas relacionadas con la firma Papel Prensa SA.relativas a prácticas desleales, actividades monopólicas, abuso de posición dominante, perjuicios al Estado Nacional en su carácter de socio y a los restantes accionistas y a los adquirentes en Bolsa, así como en todas aquellas que pudieran surgir de las investigaciones que se realicen, efectuando las denuncias, reclamos y querellas que correspondan.Los fiscales Rodolfo Marcelo Molina y Hernán Schapiro destacaron que «las pruebas revelan que los hechos denunciados podrían ser parte de acciones persecutorias e impregnadas por espurios intereses económicos».Además, se refiere a su adquisición por La Nación, Clarín y La Razón.[56] Varios especialistas sostienen que Papel Prensa ejecuta un «subsidio encubierto» al diario Clarín, socio mayoritario de la empresa desde la quiebra de La Razón y la compra del mismo por parte del Grupo Clarín.Clarín fue denunciado en varias oportunidades por contar con un precio inferior al costo de producción.[nota 6] Por otra parte, el 71 % del papel de diario vendido por la empresa durante los últimos seis años fue para Clarín y La Nación.Además, se ha denunciado que el directorio de Papel Prensa, controlado por Clarín y La Nación, ha regulado el mercado del papel prensa, mediante recios y volúmenes producidos.
El 31 de julio de 1978 se puso en funcionamiento la planta productora de la empresa. En la foto:
Bartolomé Mitre (IV)
,
Héctor Magnetto
, el secretario de Desarrollo Industrial, doctor Raymundo Podestá y el presidente del Banco Nacional de Desarrollo, doctor Ianella.