El ministro también pudo intervenir rápidamente y tomar decisiones gracias a poderes ministeriales adicionales.
La buena higiene y el mantenerse alejado de las personas enfermas se consideraban suficientes.
RIVM y Erasmus MC pusieron a disposición pruebas para determinar si alguien está infectado con SARS-CoV-2.
El primer ministro Mark Rutte hizo un llamado a la nación para detener este comportamiento.
[7] Tres días después, se anunció en una conferencia de prensa que todos los restaurantes, museos, clubes deportivos y escuelas debían cerrar.
[17] En abril se sucedieron numerosas acciones políticas en respuesta a la crisis.
A dicha flexibilización se añadieron también los cambios en la autorización de ayudas públicas, ya que la normativa permitió otorgar hasta 800.000 euros por compañía en forma de subvención directa o ventajas fiscales.
Este impulso se integró con varias acciones institucionales de las semanas anteriores, y sirvió de base al plan recuperación económica (Next Generation EU) presentado por Von der Leyen la semana siguiente.
[22] Hasta entonces, Merkel —quien ocho años antes, en el punto más álgido de la crisis del euro, aseguró que no habría eurobonos «mientras yo viva»[23]— se había opuesto a la propuesta de Macron para crear un fondo que obligaría a los 27 a aumentar la deuda de forma conjunta.
[24] En el plano internacional, durante el mes de mayo la Comisión lanzó la "Respuesta mundial al coronavirus", una acción que perseguía el «acceso universal a vacunas, tratamientos y tests de coronavirus asequibles».