[1][3] Su madre era republicana libertaria y su padre, Germinal Ros, un militante comunista.
[4] Esto hizo que solo llegaran a publicarse dos números de la revista Alborada.
[1] Pasó tres días en prisión hasta que le fue concedida la libertad provisional.
[4] Mientras se esperaba el juicio, consiguió huir a París con ayuda de amigos.
[1] Ese mismo año, su vida fue recopilada en el libro de la ensayista y profesora María Lopo Palmyre Ros e a revista Alboarada (Vigo,1966) un proxecto pioneiro da prensa clandestina de mulleres, que fue presentado en Vigo por la autora y la propia Ros, junto a Ramón Sarmiento, Amelia Pérez y Ricardo Gurriarán.