La obra carece de un argumento o una trama propiamente dicha.
El protagonista es parcialmente autobiográfico, ya que del Paso también fue en su juventud un estudiante de medicina, pero abandonó la carrera cuando se dio cuenta de que no soportaba ver los cuerpos muertos y el olor de la sangre.
[1] El tono de la novela es lúdico, rabelesiano, abunda en juegos de palabras, aliteraciones, retruécanos, imágenes surrealistas y referencias de todo tipo, desde la historia hasta la literatura y el cine.
Del Paso ha señalado que esta es su novela preferida.
Fue traducida al francés por Michel Bibard y publicada en la editorial Fayard en 1985.