[1][2] La construcción del palacio se llevó a cabo en el siglo XVI, tal como revelaron algunas tejas marcadas con dicha centuria recuperadas tras su demolición.
De esta forma, tras el fallecimiento en 1913 del viudo de la III condesa, usufructuario del palacio y todos sus bienes, tomaron posesión del mismo Mariano Ferrández Estage y su esposa Candelaria Fernández de Mendívil y Milagro, baronesa (Edle) del Sacro Imperio, quienes serían sus últimos moradores.
Los propietarios enajenaron la finca a Sanz Hermanos que demolieron el edificio en 1942 y sobre su solar, de unos 1.500 metros cuadrados, se construyeron cuatro fincas de viviendas en las calles Mayor y Don Juan de Aragón que perduran hasta hoy.
Destacaba su interesante portada plateresca y un gran patio de dos cuerpos con doce columnas.
Esta fuente fue regalada por los herederos al Ayuntamiento de Zaragoza, si bien actualmente se desconoce su paradero.