Palacio Piria (Ensenada)

Tal es así que en 1884 ya se había emparentado con el ex Ministro de Hacienda Francisco Uriburu.

Con este, su flamante suegro, comenzaron pronto prometedoras empresas y así es que por esos años, adquiere una Estancia en Punta Lara con la idea de invertir esas tierras para la ganadería y la cría de equinos pura sangre.

En 1925, lo adquiere empresario y alquimista uruguayo Francisco Piria con el propósito de transformar la zona en un importante balneario.

Lo que más se destaca por haberlo sido muchos años y por la afectiva memoria de la gente ante este recuerdo, del que muchos hoy son aquellos pequeños protagonistas ya crecidos, es su función como colonia de vacaciones y asilo para niños huérfanos.

También tuvieron allí lugar varias dependencias del estado y un club de abuelos, entre otras cosas.

[3]​[4]​ Entre 1995 y 2002, el edificio ya abandonado sufrió una serie de vandalismos que terminaron por deteriorarlo.

En 2011 la ONG Casa Española de Mujeres (CEM) junto al patrimonialista local Ezequiel Aldazábal, comenzaron arduas gestiones para restaurar el Palacio, llegando a conseguirse apoyos importantes y con ellos los fondos requeridos.

En el 2019, lo lograron promover a nivel nacional en el marco del Día de los Monumentos y Sitios Históricos.