Partido Comunista de Brasil

Fue fundado en 1958[11]​ como un ala disidente aliada al estalinismo dentro del Partido Comunista Brasileiro (PCB), que, en aquella época, se oponía a las reformas defendidas por Nikita Jruschov durante el XX Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética en 1956.

Edita su prensa llamada A Classe Operária (La Clase Obrera)[12]​ y la revista Princípios, internacionalmente, es miembro del Foro de São Paulo[13]​ y movimiento estudiantil, organizado en base a la Unión de Juventudes Socialistas (UJS).

Cuando se hizo la división internacional en el movimiento comunista, a partir del XX Congreso del PCUS en 1956, el PCB rompió con dicho partido en el V Congreso en 1960, y esta ruptura llegado a la dirección del PCB, que apareció en la Conferencia Mantiqueira en 1943, con Mauricio Grabois, Pedro Pomar, Diógenes Arruda Casa y João Amazonas, entre otros.

A diferencia de la línea revisionista del V Congreso, la Conferencia aprobó el Manifiesto Programa, que trazó una línea revolucionaria; reintrodujo el Estatuto aprobado en el IV Congreso; aprobó una resolución sobre la unidad de los comunistas, firmando el principio de que en cada país sólo puede existir un único partido marxista-leninista; decidió reeditar "La clase obrera", ex órgano de prensa del Comité Central del Partido; se aprobó la ruptura con la Unión Soviética; y finalmente se eligió un nuevo Comité Central.

Estas resoluciones históricas marca no sólo la ruptura completa y decisiva con los revisionistas, sino también el propósito de reorganizar la "verdadera vanguardia marxista-leninista en Brasil".

Participado en esta Conferencia, João Amazonas, Mauricio Grabois, Ferreira Casa, Mário Alves, Jacob Gorender, Miguel Batista y Apolonio de Carvalho.

Entre estos emisarios, fue el presidente exiliado del partido, João Amazonas, que fue recibido por el propio Mao Zedong.

Al año siguiente, el grupo elaboró una declaración de apoyo a la Revolución Cultural que estaba en marcha en China.

Siendo repelidas las dos primeras, mientras que la tercera expedición logró derrotar a los últimos focos de resistencia.

En un clima donde la oposición comenzaba a ganar fuerza, la prensa informó del crimen, que causó gran conmoción dentro y fuera de Brasil.

La dirección del Partido, duramente golpeada, funcionó, hasta la amnistía, sobre la base de un núcleo en el exilio.

El PCdoB retomó su espacio parlamentario y eligió a sus primeros diputados bajo la clandestinidad.

La refundación de la UNE (1979), con Aldo Rebelo, marcó el comienzo del partido y su hegemonía en la política universitaria (que ha continuado desde entonces, excepto en el bienio 1987-1988).

En el sindicalismo, el PCdoB adoptó inicialmente una política de alianza con el sindicato vinculado al PCB, adhiriéndose en 1983 a la Conclat , que también incluyó la moderación del partido.

En ese momento, el partido se opuso a la Central de Trabajadores (brazo sindical del PT).

En las elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente de 1987 , el PCdoB consiguió seis diputados, entre Haroldo Lima y Aldo Arantes.

La crisis social y económica que siguió al Plan Cruzado (1987) llevó PCdoB a romper el PMDB.

En 1989, junto con el Partido Socialista Brasileño (PSB), el PCdoB respaldado la candidatura de Lula da Silva para presidente.

Junto con el PT, el PCdoB también hizo una fuerte oposición al gobierno de Fernando Collor.

En esa ocasión, se hizo hincapié en la conducción del propio Lindberg Farias, entonces presidente de la UNE y militante PCdoB.

Esta decisión abrió ideológicamente el partido y permitió la incorporación de nuevos militantes.

Esta participación se amplió en 2004 con el nombramiento de otro adjunto, Aldo Rebelo, para la coordinación de la política del gobierno (lo que dejaría al año siguiente para volver al Congreso).

Este movimiento es visto como un paso hacia la masificación del Partido Comunista de Brasil.

En 2015, durante la X Conferencia Nacional, la militante, Luciana Santos fue elegido presidente del partido.

Su línea fue la Guerra popular prolongada, es decir, cercar las ciudades desde el campo, y el noreste definida como la mejor zona para desencadenar la lucha.

Esta organización también inició la lucha armada, e incluso fue parte del frente armado, que se compone de las siguientes organizaciones: Acción Libertadora Nacional (ALN), Vanguardia Popular Revolucionaria (VPR) y Partido Comunista Brasileño Revolucionario (PCBR).