[2] Abrió su primer taller de costura en Saint-Louis donde su madre se había mudado con su nuevo esposo, un maestro.
Un año después Djibril Diop Mambéty la contrató para Hyènes (1992), una crítica mordaz del orden económico poscololinal, donde dirigió su primer departamento de vestuario.
[3] Empezó a trabajar en la industria del cine con el primer cineasta senegalés Ousmane Sembène en Guelwaar ( Ousmane Sembène, 1992) y luego con Le siguieron otros trabajos: Samba Traoré ( Idrissa Ouedraogo, 1992), el corto Presiones ( Sanvi Panou, 1995), Les Caprices d'un rivière ( Bernard Giraudeau, 1996) –una historia ambientada en la región del río Senegal donde la diseñadora vivió su propia infancia–, Más allá del jardín ( Pedro Olea, 1996) o Le Déchaussé (Laurence Attali, 2003), cortometraje en el que interpretaba el papel de la propia Zaglad.
Además, colabora habitualmente con el mundo del espectáculo, realizando boubous para cantantes como Baba Maal o Youssou N'Dour.
En 1990, creó en Dakar la escuela Leydi, para formar en artes tradicionales del traje y las galas.
[3] Implicada en el desarrollo del mundo rural, gestiona en Casamance (el país de su madre) un dispensario que se extiende por 42 pueblos.
En Alemania el Museum für Kunst und Gewerbe (MKG) de Hamburgo le dedicó una exposición en 2005.
Esta ópera estaba particularmente cerca del corazón de Oumou Sy y su esposo, quien murió poco antes.
Este galardón saluda su compromiso con la lucha contra la brecha digital en el continente africano: “ Es una nueva forma de colonialismo.
Ante este incidente, que puso en peligro las relaciones diplomáticas entre Senegal y Libia durante algún tiempo, se creó un comité de apoyo internacional que reunió a personalidades como los cantantes France Gall, Youssou N'Dour, Baba Maal, el artista visual Ousmane Sow o los cineastas Laurence.
Además de la humillación sufrida, la estilista también deberá enfrentarse a las dificultades económicas provocadas por estas disputas con la justicia.