El nombre proviene del ruso "kroshit" (крошить) que significa picar (en pequeñas partes).
La okroshka es considerada una sopa ideal para el verano y se toma para refrescar.
Los ingredientes para su elaboración son picados finamente en brunoise y son mezclados con el kvas justo antes de ser servidos a la hora de la comida.
Esto permite a las verduras preservar su textura crujiente.
Los ingredientes son muy similares a los empleados en la ensaladilla rusa.