Es el segundo observatorio astronómico en La Aguada, ya que el primero fue inaugurado en los años treinta, en el edificio del Colegio Sagrada Familia.
Carlos Etchecopar, quien expresó: “La era del espacio ya nos alcanza muy de cerca.
Estos elementos posteriormente serían recuperados y devueltos a Secundaria, quien los mantendría en el Observatorio de Montevideo, donde se le realizaron ajustes y tareas de mantenimiento para su posible ubicación en el actual edificio del Instituto Batlle y Ordóñez, cuando este cuente con un lugar apropiado.
Luego el servicio se vio ampliado atendiendo un mayor número de liceos junto a los observatorios ya existentes en Montevideo, como el Observatorio de Montevideo y del Instituto Dámaso Antonio Larrañaga, así como también de instituciones privadas habilitados por Secundaria y el Liceo Militar.
Su campo de acción cubre las áreas formativa, informativa y cultural.